Guía para managers: ¿Cómo actuar en base al feedback que recibimos?

¿Te imaginas tener una guía para managers a la que acudir cada vez que se presente un conflicto en tus equipos?

Son muchos los factores que determinan el buen funcionamiento de una empresa. La calidad del producto o servicio que ofrece es determinante, así como la solidez financiera y un exhaustivo conocimiento del mercado. Pero muchos directivos se olvidan de uno de los elementos más importantes: el equipo, ese conjunto de personas que bajo el paraguas de una misma marca hace que todo lo anterior sea posible.

En la organización hay seres humanos que sienten y opinan. La labor de un buen manager es conocer cuáles son sus sensaciones y emociones respecto a su labor en la empresa. Actuar en consecuencia para que la motivación, la productividad y el compromiso con la compañía no decaigan debe de formar parte de tus prioridades. Recuerda que para tomar las mejores decisiones orientadas al equipo es preciso fomentar la cultura del feedback en la empresa.  

 ¿Qué sucede si no escucho a mi equipo? 

Si el equipo no está comprometido con los valores y misiones de la empresa su motivación y eficacia desaparecerán hasta el punto de que tu compañía corre el peligro de perder el talento humano que hace posible su desarrollo y éxito. Según el II Índice de Medición de la Experiencia de Empleado de Lukkap “el  13% de los empleados en España tiene pensado cambiarse de empresa”.

Como managers, ¿qué podemos hacer para que esto no suceda?. Lo primero es escuchar de forma activa lo que tienen que decir los profesionales sobre su trabajo en la empresa. Si logramos que aumente su nivel de bienestar dentro de la organización conseguiremos que el negocio retome el impulso perdido.

Guía para managers: Actúa en base al feedback recibido 

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Antes de actuar recuerda que deberás mantener la mente abierta a todo tipo de opiniones. Tu equipo está formando por seres humanos no por robots que actúen en base a órdenes.

– Los mensajes negativos. En ocasiones recibirás respuestas que mostrarán el disgusto de los empleados por una situación determinada en la empresa. En estos casos deberás estar preparado para ofrecer una solución con la que puedas cambiar ese sentir. Es importante que no te sientas atacado. Analiza el problema que te plantean y activa todos los mecanismos precisos para atajarlo. Piensa en el feedback negativo como si fuera una oportunidad.

– Si entiendes las necesidades de tu equipo podrás aportar la solución que genere un impacto más positivo dentro del mismo.

– Mantén una comunicación abierta y constante. Tu equipo debe conocer de qué forma se va a implementar la solución que has aportado para acabar con el problema que te han planteado.

– Una vez recibido el feedback tu actitud debe ser activa. Los trabajadores que confían sus sentimientos y experiencias a cambio esperan una reacción por tu parte: ofrecer la información que precisan, cambiar la configuración del equipo, trasladar a los directivos sus preocupaciones con el fin de obtener una solución, etc. Tu obligación es poner en marcha los mecanismos que sean necesarios para que la rueda de la confianza y compromiso con la empresa se ponga de nuevo en marcha.

Practica la empatía. Es importante que te pongas en la piel de la otra persona para contextualizar de forma adecuada la información que has recibido. Tu labor no es emitir un juicio de valor sobre lo que te están contando si no aportar soluciones que eviten el conflicto.

La discreción será una de tus mejores bazas. Tu equipo ha confiado en ti así que responde con cierta prudencia. Si debes alabar un buen trabajo hazlo en público. Pero si tu misión es corregir mejor que sea en privado. La diplomacia es un arma muy poderosa con la que se ganan muchas batallas. Según un estudio de Eagle Hill Consulting  el 78% de los profesionales prefiere recibir feedback de su desempeño en persona. Así que sí, las formas importan.

– En ocasiones el problema no parte del equipo si no de un miembro del mismo. La solución deberá ser personalizada y no tendría por qué implicar a todo el grupo.

Mantén la vigilancia. Es decir, continúa haciendo encuestas, reuniones o entrevistas para saber si tus soluciones han sido válidas.

Confiamos en que esta guía para managers te resulte un recurso útil de consulta cada vez que lo necesites. Recuerda que en Happyforce te ayudamos a entender qué le preocupa o hace felices a tus empleados.

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