Uno de los grandes retos que se afrontan en un proceso productivo o creativo es el fenómeno del trabajo en equipo. Las dinámicas de integración laboral permiten que ese trabajo a varias bandas sea a la vez eficiente y satisfactorio tanto para la organización como para los participantes.
En este texto te presentamos de manera muy resumida en qué consisten las dinámicas de integración laboral y los grandes tipos que existen en función de sus objetivos. También te mostramos algunos ejemplos de actividades para que el trabajo en equipo sea más fluido.
Qué son las dinámicas de integración laboral
Cuando hablamos de dinámicas de trabajo en equipo para empresas nos estamos refiriendo a técnica concretas para favorecer la cooperación entre los miembros de un equipo y la integración de objetivos de una manera coherente y eficaz. Serían, en este sentido, “ejercicios”, actividades más o menos lúdicas, pero siempre orientadas a la incrementar la motivación.
A los forofos futboleros (y en realidad a cualquier practicante o aficionado de deportes de equipo) todo esto les tiene que sonar muy familiar. Porque una cosa es el rendimiento individual y otra distinta el rendimiento colectivo. Hay determinadas actividades (cada vez más) en las que el trabajo en equipo es imprescindible.
Pero eso no significa que todos seamos iguales o hagamos lo mismo en un trabajo colectivo. En ese sentido, una integración positiva de todos los miembros de un equipo y su compenetración son esenciales para sacar lo mejor de cada uno y aprender a remar juntos hacia las metas fijadas mientras cada cual desempeña su papel.
Tipos de dinámicas
Existen técnicas para casos o momentos específicos y otras que ponen el acento en el colectivo. En este artículo nos centramos en las segundas con unas cuantas actividades de integración laboral. Pero primero vamos a enumerar algunas “familias” para que lo tengas más fácil a la hora de elegir cuál te conviene aplicar:
- Dinámicas para mejorar el clima laboral: son aquellas que buscan crear un ambiente de confianza y camaradería, minimizando rivalidades malsanas y conflictos laborales; ideales para integrar a nuevos miembros.
- Dinámicas orientadas a la resolución de problemas: en algunos trabajos la tarea principal pasa por afrontar y desfacer entuertos constantemente, siendo necesario ser resolutivo y soportar bien el estrés.
- Dinámicas de comunicación en el trabajo: la comunicación es un aspecto fundamental del trabajo en equipo en todas sus vertientes. Un arma poderosa que hay que saber manejar de la manera adecuada.

Una lista de dinámicas de integración laboral
No es ni mucho menos la única posible, pero aquí tienes una lista básica de actividades variadas y eficaces.
Juegos tradicionales
Los grandes clásicos que todos conocemos: las películas, el pañuelo, el escondite inglés o incluso el trivial (¡admite propuestas!). Ayudan a romper el hielo y conocerse mejor, requieren muy poca preparación y son siempre divertidos.
Reto o desafío
Un juego con mucha enjundia. Dos grupos enfrentados, una caja negra con retos desconocidos (ojito al establecerlos) y la opción de afrontarlos o desafiar al otro grupo a hacerlo. Se usan puntos para definir los resultados, pero puedes hacer tus normas…
Actividades de voluntariado
El equipo elige un proyecto social, define unos objetivos colectivos y procura sacarlos adelante. Una de las mejores actividades de motivación laboral que quepa imaginar por lo mucho que aporta en cuanto a cultura de empresa e imagen corporativa.
Nudo humano
Aquí se trata de gestionar un problema de manera colaborativa: cada persona agarra las manos de otras dos no anexas, y entre todos han de deshacer el enredo y formar un círculo sin soltarse. Una ayuda, por si te haces un lío.
SimSoc
El más elaborado de los juegos de rol social. Quizás no sea para todos los públicos (habrá a quien le fascine y a quien le aburra soberanamente), pero su potencial en cuestiones de cooperación, comunicación y liderazgo es enorme.
Puzzles dobles
Destaca entre las actividades recreativas para empresas por potenciar numerosos aspectos del trabajo en equipo y ser muy revelador… Se forman grupos y a cada uno se le da un puzzle sencillo, pero ojo: ¡algunas piezas están en posesión de otros grupos! ¿Terminarán todos?
Dos verdades y una mentira
Muy buena dinámica en afterworks y cenas de empresa: cada participante menciona dos verdades y una mentira sobre sí mismo (su vida, su personalidad, sus gustos, sus aspiraciones…) y el resto trata de adivinar si es cierta o no.
Y al terminar, un balance
Siempre es conveniente que, tras la conclusión de cada actividad, evaluemos entre todos (pero bajo la guía del organizador) tanto el objetivo de la misma como su desarrollo, y lo que hemos aprendido en el proceso.
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